Los cazadores de “cortes” perdidos

Es decir, los amantes del vino de corte, o de ensamblaje o blends, como está de moda ahora llamar a aquellos que se elaboran con más de un tipo de uva o varietal; al viejo estilo.

Al estilo de cuando aún no habían ingresado al mercado internacional los llamados nuevos países productores.

Fueron ellos, con Estados Unidos y sus vinos de California a la cabeza, los creadores de un nuevo estilo de marketing para promocionar las producciones de una sola cepa, y así escapar de las normas tradicionales sobre protección de denominaciones de origen controladas (DOC).

Entonces, ¡bebedores de corte, uníos y buscad precios!, porque los anaqueles de mercadillos, tenderetes, supermercados y casas especializadas en la venta de escabios se caracterizan por tener en disposición un sinfín de varietales y muchos menos de corte, y además, estos casi siempre caros, más allá de sus verdaderas calidades.

Aquí algunas propuestas, siempre a lo tomatero: dirigida a quienes les gusta beber vino y no a aquello que más les gusta gastar en vino y ostentar o andar por ahí como charletas o sabiondos. Para ellos y ellas –conocedores, connoisseurs, una tribu que con mucha frecuencia bordea los territorios de la tilinguería- sobran las revistas, las páginas digitales y cuanto discurso imaginemos.

Aquí va la primera…

Valle de Luna (bodega Reserva de los Andes, de Junín, Mendoza…Malbec, Bonarda, Tempranillo y Cabernet Sauvignon, Syrah, Merlot. De precio increíble conforme a su calidad, pues se trata de una vinificación joven y ligera, de esas a las que se las suele calificar como para todos los días.

En el primer caso, la presencia del Malbec se complementa con la del Bonarda y el Tempranillo y su frescura. Y en el segundo el Cabernet Sauvignon, el Syrah y el Merlot logran un notable equilibrio…

Como adelantáramos, si tienen en cuenta sus respectivas relaciones entre precio y calidad, se llevarán una sorpresa. En este país de economía desquiciada en manos de especuladores, en mercadillos y tiendas se encuentran a valores increíbles.

Siempre es bueno recordar ciertos clásicos

De vinos San Felipe hablamos, de la bodega La Rural, desde fines del XIX una de las pioneras en la producción de vino argentino, de Maipú, Mendoza.

Pero hoy una especialidad de esa etiqueta, el 12 Uvas San Felipe, con: Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Malbec, Merlot, Syrah, Bonarda, Sangiovese, Barbera D’asti, Pinot Noir, Tempranillo, Chardonnay y Chenin Blanc.

Y es cierto lo que de ese vino comenta la propia bodega: Rubí ciruela brillante. Un aroma pronunciado y frutal, donde destaca la fruta roja fresca matizada con dejos ahumados…En boca, sorprende su redondez y equilibrio entre la acidez y una agradable estructura debida también a taninos fluidos de gran suavidad.

Es un vino con 10 meses de crianza en barrica y también de gran relación precio-calidad. A la fecha de esta publicación se lo podía a compara a menos de 4.000 pesos la botella.

Y ahora, un poco más de esfuerzo

Porque pasamos a un vino de corte que requiere cierto sacrificio de bolsillos. Nos referimos al Atemporal, de la bodega Altavista, de Chacras de Coria.

Se trata de un Malbec-Cabernet Sauvignon-Petit Verdot, de vides del Valle de Uco, criado en roble francés. Es cierto, con olores a frutos rojos y un vino sólido. Sus productores lo presentan como: Complejo en nariz… En boca es un conjunto equilibrado: lo sedoso del Malbec, la estructura y potencia del Cabernet Sauvignon, y la profundidad del Petit Verdot. Complejo y persistente, con gran potencial de guarda.

Por los cortes…¡Salud!