Humeante, sencilla y marinera es doña Sopa de pescados
Primero, una receta tomatera que en pocas líneas pasaremos a contarles, pero, como ustedes ya saben – no podemos con nuestra vocación de siempre por algo de historia -, luego ciertos datos tomados de un sitio interesante: Basado en hechos reales.
A conseguir…
Las cabezas y recortes de dos o tres pescados (la nuestra de los últimos días incluyó la cabeza, el espinazo y la cola de una anchoa de banco, las mismas partes de una de esas truchas que llaman salmonda y de una corvina rubiecita). Varias cabezas de langostinos. Un tomate maduro, una papa rallada, tres dientes de ajo, una cebolla, un puerro, una zanahoria, varias ramas de perejil, un cucharada de café de estragón seco, ají molido y pimentón dulce dos ramas de tomillo, algunas hojas de laurel, algo de sal y granos de pimienta, un vaso generoso de vino blanco y un chorro de aceite de oliva.
Entonces…Todo en una olla tapada y con cuatro litros de agua. Que se mantenga a temperatura de hervor durante un par de horas…
Colarla y servirla como caldo o con fideos cabello de Ángel, por ejemplo. Siempre ajustada en sal y pimienta, con un algo de jugo de limón…Después nos cuentan.
Ahora, los chismes prometidos…
Las primeras evidencias de la sopa en la práctica culinaria se remontan al período paleolítico superior, una época en la que el fuego y las herramientas de piedra permitieron a nuestros antepasados transformar los alimentos de formas innovadoras. Los hallazgos arqueológicos revelan la presencia de rocas alteradas térmicamente, evidencia de la cocción en agua caliente.
Se cree que los primeros humanos utilizaban pieles y cestas herméticas para hervir agua, lo que sugiere que la sopa podría haber surgido como una forma de cocinar alimentos en agua caliente.
Un salto en el tiempo…Las sopas de pan se convirtieron en un alimento básico en las culturas mediterráneas y europeas, utilizando el pan como espesante y base para el caldo…Y añadimos: En las Américas central y del Sur ya se elaboraban desde tiempo inmemoriales y hasta nuestros días llegaron (ver https://tomate.net.ar/2024/08/los-latinoamericanos-de-sopa-somos/).
La palabra sopa proviene del germánico occidental supp, que se refería a una rebanada de pan cortada en trozos sobre la que se vertía un caldo. La palabra fue latinizada como suppa alrededor del año 500 d.C., manteniendo su significado original.
A lo largo de la Edad Media, sopa llegó a definir tanto los trozos de pan que se remojaban en el caldo como el caldo mismo, que se espesaba con pan. El concepto de sopa como un caldo con ingredientes sólidos se fue desarrollando gradualmente a través de los siglos.
La sopa ha evolucionado a lo largo de la historia, adaptándose a las culturas y los ingredientes disponibles en cada región. Desde las sopas de pan de la antigüedad hasta las elaboradas creaciones de la cocina moderna, la sopa ha mantenido su lugar como un plato versátil y nutritivo.
Los ingredientes de la sopa varían ampliamente, incluyendo carne, verduras, pescado, mariscos, legumbres, cereales y especias. Las técnicas de cocción también han evolucionado, desde la simple cocción en agua hasta el uso de métodos más sofisticados como el estofado y la clarificación.
La sopa se puede clasificar en dos categorías principales: sopas claras y sopas espesas. Las sopas claras se caracterizan por su caldo transparente, mientras que las sopas espesas se espesan con ingredientes como harina, almidón, crema de leche o huevos.
La cocina francesa ha contribuido significativamente a la clasificación de las sopas, distinguiendo entre bouillon, consommé, purés, bisquets, sopas de nata y veloutés, cada uno con sus propias características y técnicas de preparación.
La sopa es un plato universal, encontrándose en todas las culturas del entorno. Cada región ha desarrollado sus propias recetas y tradiciones, reflejando sus ingredientes locales y sus preferencias culinarias.
Europa: Desde la sopa de cebolla francesa hasta la sopa de ajo española, las culturas europeas han desarrollado una gran variedad de sopas, muchas de ellas con raíces en la tradición medieval.
Asia: Las cocinas asiáticas se caracterizan por sus sopas de fideos, como el ramen, que es de origen chino aunque la moda lo hace japonés o coreano, el pho vietnamita y el laksa malayo, cada uno con su propio caldo y combinación de ingredientes.
Las sopas latinoamericanas son conocidas por sus sabores intensos y sus ingredientes frescos, como el sancocho dominicano, la sopa de tortilla mexicana y el ajiaco colombiano-
En el siglo XIX, la invención de las conservas revolucionó la forma en que se preparaba y se consumía la sopa. Las sopas enlatadas se volvieron populares, ofreciendo una forma rápida y fácil de disfrutar de este plato.
La sopa instantánea, inventada en el siglo XIX, se convirtió en un alimento básico en el entorno moderno, ofreciendo una opción rápida y conveniente para el almuerzo o la cena.
La industria alimentaria ha desarrollado una amplia gama de sopas enlatadas, deshidratadas y congeladas, que satisfacen las necesidades de los consumidores modernos.
¿Cuál es la diferencia entre una sopa y un caldo?
La principal diferencia entre una sopa y un caldo es la presencia de ingredientes sólidos. Un caldo es un líquido base hecho de huesos, carne o verduras, mientras que una sopa contiene ingredientes sólidos cocidos en el caldo.
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