¿Un domingo de julio?…Allá vamos, Smörgåsbord
Casi en la iglesia. Mejor dicho en el mismo edificio de piedra adusta pero hermosa. En el bajo de San Telmo, en la vieja Buenos Aires. Del restaurante del Club Sueco se trata.
Tomateras ellas y tomatero él, comensales de tiempos y copas…